LECCIÓN 9  (regresar al índice)

LA VISIÓN DEL CARNERO Y DEL MACHO CABRIO

PASAJE PARA ESTUDIO: Daniel 8:15-27.
LECTURA DEVOCIONAL: Daniel 8:1-14.
TEXTO PARA MEMORIZAR: Proverbios 16:32.


PROPÓSITO
    Explicar la fidelidad del pueblo de Dios en medio de los sufrimientos.

BOSQUEJO

1.    EL CARNERO REPRESENTA AL IMPERIO DE MEDIA Y PERSIA (Daniel 8:2-8)
2.     EL MACHO CABRÍO REPRESENTA AL IMPERIO DE GRECIA Y MACEDONIA
3.    ACCIONES DE ANTÍOCO EPÍFANES Y SUS RESULTADOS
A.    INTENTO DE DESTRUIR LA RELIGIÓN JUDÍA (Daniel 8:9-14)
B.    REBELIÓN DE LOS JUDÍOS CONTRA LOS SIRIOS


IDEA CENTRAL
Los imperios mundiales que se destacan son:
1.    El imperio de Babilonia.
2.    El imperio de Media y Persia.
3.    El imperio de Grecia.
4.    El imperio de Roma.
Estos imperios son temporales.  Llegará el momento cuando Dios establecerá su reino.  Será un reino eterno, el cual nunca tendrá fin.  Allí los santos vivirán felices en la presencia de Cristo, y nunca más conocerán el dolor, la muerte y la injusticia.


INTRODUCCIÓN

    Como notamos en la lección 1 de esta serie sobre el profeta Daniel, desde Daniel 2:4 hasta el final del capítulo 7, fue escrito en el idioma arameo, que era el idioma de los imperios orientales de aquellos tiempos.  Ahora, desde Daniel 8:1 hasta el fin del libro, todo está escrito en el idioma hebreo, porque lo que se trata es de suma importancia para Israel, el pueblo escogido de Dios.

    Esta nueva visión “en el año tercero del reinado del rey Belsasar”, ocurrió por el tiempo del banquete descrito en Daniel 5, cuando Belsasar perdió su vida y el imperio babilonio cayó en manos del imperio de Media y Persia.


I.    EL CARNERO REPRESENTA AL IMPERIO DE MEDIA Y PERSIA (Daniel 8:2-8)

    Daniel 8:2.  Los medo-persas establecieron su ciudad capital en Susa, en vez de hacerlo en Babilonia donde tuvo su trono Nabucodonosor.  En el Libro de Ester 2:5, se menciona a Susa como la residencia real de Persia y Media.  Los eventos de esta visión se refieren a los imperios mundiales segundo y tercero, o sea al imperio Medo-Persa y el imperio de Grecia, los reinos de plata y de bronce de Daniel 2, y representados por el oso y el leopardo en Daniel 7.

    Daniel 8:3-8, describe la visión del carnero (el macho de las ovejas) y el macho cabrío.  El carnero de dos cuerpos representa al reino medo-persa (v. 20).  El cuerno que subió por último era Persia, que era más fuerte que Media.  Juntos conquistaron aun más del mundo que Babilonia había subyugado.

II.     EL MACHO CABRÍO REPRESENTA AL IMPERIO DE GRECIA Y MACEDONIA

El macho cabrío representa al imperio de Grecia y Macedonia; y el “cuerno notable” (v. 5) representa a Alejandro el Grande, el feroz y veloz conquistador representado por el leopardo con cuatro alas en Daniel 7:6.  Pero "en su mayor fuerza" murió Alejandro el Grande cuando contaba solamente con 33 años de edad, habiendo extendido su imperio desde Egipto hasta India.  Estableció la capital de su vasto imperio en Babilonia, donde en el año 323 a.C. murió borracho, llorando porque no había más mundos que él pudiera conquistar.  En Daniel 8:8 dice que "salieron otros cuatro cuernos notables", los cuales representan a los cuatro generales de Alejandro el Grande que se dividieron el imperio entre sí mismos: El general Casandro tomó a Macedonia y Grecia; el general Lisímaco tomó a Tracia y Asia Menor; el general Ptolomeo tomó a Egipto; y el general Seleuco tomó a Siria.  Fue de Siria que salió otro "cuerno pequeño" (v. 9) conocido como Antíoco Epífanes.


III.    ACCIONES DE ANTÍOCO EPÍFANES Y SUS RESULTADOS

A.    INTENTO DE DESTRUIR LA RELIGIÓN JUDÍA (Daniel 8:9-14)

    Daniel 8:9-14 describe las acciones de este "cuerno pequeño" que salió del tercer imperio mundial.  El "cuerno pequeño" de Daniel 7:8 salió del cuarto imperio mundial.  La historia de su desolación de Jerusalén se encuentra en uno de los libros "apócrifos" llamado el Primer Libro de los Macabeos.  Antíoco Epífanes procuró exterminar a los judíos y a su religión.  Él devastó la ciudad de Jerusalén en 168 a.C., profanó el Templo al sacrificar un cerdo sobre el altar y luego erigiendo allí un altar al dios griego Júpiter.  Prohibió también  el culto de los judíos en el Templo y prohibió el rito de circuncisión bajo pena de muerte.  Antíoco destruyó todos los ejemplares de las Santas Escrituras que pudieron hallarse y mató a todo aquel que tuviera tales ejemplares en su poder.  Miles de familias de los judíos fueron vendidos como esclavos y se usó toda clase de tortura para obligar a los judíos a renunciar a su religión.  El versículo 12 indica que Dios permitió todo esto por causa de la "prevaricación", o sea, la transgresión de la Ley de Dios por parte de los judíos idólatras.  Pero todas estas barbaridades sufridas bajo Antíoco Epífanes son solamente una pequeña sombra o profecía de lo que va a hacer el Anticristo, o sea, el "cuerno pequeño" de Daniel 7:8, en el tiempo de la Gran Tribulación después del Rapto de la iglesia (la novia de Cristo).


B.    REBELIÓN DE LOS JUDÍOS CONTRA LOS SIRIOS

    En el año 165 a.C. un sacerdote judío llamado Macabeo reunió un ejército y libertó a Jerusalén de los sirios.  Entonces fue finalmente purificado el Templo y rededicado en la celebración de la Fiesta de las Luces, o Hánuka, que los judíos celebran hasta el día de hoy en el mes de diciembre.

    Esta fiesta de la dedicación se menciona en Juan 10:22.  Daniel 8:15-27 nos da la interpretación de la visión del carnero y del macho cabrío, que le dio el ángel Gabriel, con el fin de que el profeta supiera “lo que ha de venir al fin de la ira” (v. 19).  Antíoco Epífanes actuó como uno poseído por Satanás.  El Anticristo, o sea, el “Cuerno pequeño” de Daniel 7, hará todas sus proezas en el poder de Satanás, no con su propia fuerza (v. 24), procurando destruir al pueblo de los santos, o sea, el remanente fiel de Israel.  En el versículo 25 se incluye el plan del Anticristo quien, con su sagacidad, controlará a la gente completamente al requerir que todos lleven la marca de 666 en la mano derecha o en la frente para poder comprar o vender (Apocalipsis 13:16-18).  El Anticristo peleará contra el Príncipe de los príncipes, Cristo (v. 25), pero será destruido (Apocalipsis 19:20) y Cristo reinará con Su pueblo escogido.  Daniel no sabía nada de la Iglesia del Nuevo Testamento, porque ese misterio estuvo oculto para los profetas, pero fue revelado por Jesucristo. Los que confiamos solamente en Jesucristo para nuestra salvación eterna, también reinaremos con Él en ese glorioso Reino Milenial (Apocalipsis 20:6).


CONCLUSIÓN

    Sólo los cristianos, los que somos redimidos por Jesucristo y confiamos en Su Santa Palabra, tenemos el programa de toda la historia: desde la creación y la caída del hombre, hasta la culminación de nuestra  redención y la restauración de todas las cosas. Sólo nosotros tenemos en las Sagradas Escrituras una perspectiva desde la eternidad hasta la eternidad, y por ello debemos estar confiados en que Dios está en control de la historia, y en Sus manos debemos reposar, repitiendo las palabras del Salmo 46:1-2 y 10-11: “Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.  Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida y se traspasen los montes al corazón del mar”.  “¡Estad quietos y conoced que yo soy Dios; seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra!  ¡Jehová de los ejércitos está con nosotros!  ¡Nuestro refugio es el Dios de Jacob”!


PREGUNTAS PARA DISCUTIR
1.    ¿Cuáles son algunas razones por las cuales Dios permitió que los imperios paganos trataran cruelmente a Israel?

2.    ¿Por qué Alejandro Magno pudo conquistar a otros pueblos, y no pudo superar su problema de adicción al alcohol?

3.    ¿Qué privilegios tenemos nosotros actualmente como cristianos?

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