LECCIÓN 2  (regresar al índice)

LA BIBLIA, RELATO ESCRITO DE LA REVELACIÓN DE DIOS AL HOMBRE

PARA ESTUDIO: Hebreos 1:1-4; I Juan 1:1-4; Juan 20:30-31
LECTURA DEVOCIONAL: Deuteronomio 6:20-25.
TEXTO PARA MEMORIZAR: Juan 20:31.

PROPÓSITO

    Que nos gocemos en la maravillosa experiencia de conocer personalmente al Verbo viviente, Jesucristo, tal como nos ha sido revelado en la Palabra de Dios escrita.


BOSQUEJO
I.      LA REVELACIÓN DEL VERBO DE VIDA (Hebreos 1:1-4)
II.     LA BIBLIA NOS PRESENTA AL VERBO ENCARNADO (I Juan 1:1-4)
III.    PROPÓSITO DE LA REVELACIÓN ESCRITA (Juan 20:30-31)


IDEA PRINCIPAL:  
      El relato de la revelación de Dios no es para entretener a las personas.  Es para enseñarle al hombre el camino correcto que conduce a Dios, y cómo vivir correctamente.  Para que eso tenga efecto, debe creer lo que dice la Biblia, practicarlo y compartirlo con otros también.


OCASIÓN

    Nuestra lección la hemos tomado de tres porciones de la Biblia. La primera se halla en la Epístola a los Hebreos, que fue escrita probablemente por el año 65 d. C., y de la cual no se sabe con certidumbre su autor. Su tema central es Cristo. La segunda porción se encuentra en la Primera Epístola de Juan, que fue escrita en el año 90 d. C.  En ella vemos a Cristo como el Autor de la luz y la vida.  La última porción está en el Evangelio de Juan, escrito por el mismo apóstol autor de tres epístolas escritas anteriormente, el cual contiene la vida y obra de Jesucristo, el Hijo unigénito de Dios.


EXPOSICIÓN DE LA LECCIÓN

    De una u otra manera, Dios siempre ha tenido una forma de hablar a los hombres.  Su voluntad siempre ha sido claramente revelada para conducir a los hombres hacia el plan de salvación. Sin embargo, a través de la historia los medios usados por Dios para comunicarse fueron cambiando, porque éstos tenían que ser siempre adecuados a la mentalidad de los humanos.  Es así como Dios nos habla hoy, tal como lo hizo en los tiempos antiguos.  Lo importante es que Él se ha revelado a nosotros.  La Biblia es el único libro que contiene esa revelación.


I.    LA REVELACIÓN DEL VERBO DE VIDA (Hebreos 1:1-4)

    No hay duda en estos versículos de que Dios nos ha hablado, pero sí hay una declaración abierta de que el método ha cambiado.  Desde las primeras palabras encontramos un reconocimiento de la autoridad divina del Antiguo Testamento, porque dice claramente que Dios habló por medio de los profetas.  Dios nos ha hablado muchas veces y de muchas maneras.  Su interés por nosotros es grande, y de allí que se nos ha revelado de esas maneras.  Pero ahora nos ha hablado por medio de Su Hijo, el heredero y dueño de todo el universo, porque por Él fue hecho.  Al estar Cristo en la tierra, El mismo reveló al Padre, porque Él era y es Dios.  Él hombre, con su pecado, había cortado la comunicación con Dios y lo desconoció a través de su desobediencia.  Por eso ahora era necesario que Él se revelara a nosotros.

¿Cuáles fueron esas muchas formas en que Dios se reveló a los hombres antes que viniera Cristo?  Muy bien podemos recordar los sueños, las visiones, voces claras y audibles y las revelaciones a las mentes de los profetas.  Pero cuando vino Jesús ya no era necesario todo eso, porque Dios mismo estaba en Él y todos podían conocerlo directamente.  Además de revelarse a Sí mismo delante de nosotros, Dios nos reveló Su maravilloso plan de redención por medio de Su Hijo, por lo cual podemos conocerlo íntimamente en nuestros corazones.


PREGUNTAS

1.    ¿Qué puede hallar en Hebreos 1 acerca de la relación de Cristo con el Padre, con la creación, con los ángeles y con los hombres?

2.    ¿Qué revelación debemos aceptar en nuestros días?

3.    ¿Podrá haber profetas en la actualidad en el mismo sentido en que los hubo antes de Cristo?

4.    ¿Cómo podemos distinguir cuál revelación viene de Dios y cuál no?


II.    LA BIBLIA NOS PRESENTA AL VERBO ENCARNADO (I Juan 1:1-4)

La Biblia dice que el apóstol Juan vio a Cristo en persona como el Hijo de Dios encarnado, el Verbo de vida, la luz del mundo. Lo vio como Uno con quien se puede tener comunión.  Juan había caminado con Él, y lo había tenido siempre cerca.  Por eso estaba seguro de que la Vida había sido manifestada, porque la había visto y testificado, y había anunciado la vida eterna por medio de Él.  Sabía que había escuchado Sus propias palabras y no tenía ninguna duda de que era el Hijo de Dios descendido del cielo.  En otras palabras, su comunión con Jesús había sido muy íntima, y por eso podía testificar con tanta certidumbre.

Este relato de las escrituras es para enseñarnos que nosotros también podemos tener comunión con el Cristo viviente y eterno.

    Nosotros también podemos experimentar esa comunión con Él y testificarles a todos que es el Hijo de Dios, Quien ha obrado nuestra redención del pecado.  Y, en efecto, como dice el versículo 4, nuestro gozo es cumplido cuando leemos y participamos de esta comunión con el Señor.  Leamos y estudiemos con esmero las Sagradas Escrituras.


PREGUNTAS PARA DISCUTIR

1.    ¿Qué valor tiene para nosotros la revelación de Dios?
2.    ¿Cómo nos habla Dios en nuestros días?
3.    ¿De qué manera podemos tener comunión con Cristo?


III.    PROPÓSITO DE LA REVELACIÓN ESCRITA (Juan 20:30-31)

    Es natural que en una porción tan pequeña, como lo es el Evangelio según San Juan, no podía caber todos los hechos de Jesús, siendo que Él estuvo obrando y haciendo milagros por tres años.  Pero todo lo que se escribió es suficiente para que nosotros creamos que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y que tengamos vida en Él.

Algunos han tratado de abusar de este versículo 30 con fines maliciosos, haciendo creer doctrinas falsas inventadas por ellos, afirmando que esas “enseñanzas supuestas” son tomadas de algunos de esos milagros que Jesús hizo y que no fueron escritos.  Pero ésa no es más que una trampa de Satanás para engañar a los hombres.  Porque todo el plan de salvación ha quedado escrito, registrado en la Biblia.  Ninguna cosa que no está de acuerdo con las Sagradas Escrituras puede ser inventada por los hombres bajo ese pretexto.  Las enseñanzas inventadas por los hombres no valen nada.  Toda la revelación escrita que nos fue dada es suficiente para que nosotros creamos en el Señor y alcancemos la salvación de nuestras almas.  No tenemos necesidad de agregar nada a esta revelación, no sea que aparezcamos culpables de los conceptos asentados en Apocalipsis 22:18-19.


PREGUNTAS PARA DISCUTIR

1.    ¿Por qué era necesaria una revelación escrita?

2.    ¿Puede darnos base Juan 20:30 para agregar nuevos conceptos a las enseñanzas de Cristo? ¿Por qué?
 
3.    ¿Cuál es el propósito de la Biblia?


PARA MEDITAR

1.    En Cristo hay una revelación perfecta, la más perfecta de toda revelación, que nos alcanza a todos y nos asegura la victoria.

2.    Hay seguridad absoluta en Cristo como la Palabra Viva y cimiento de nuestra fe.

3.    Los que leen y obedecen la Palabra de Dios triunfan por fe.


ILUSTRACIÓN
“La Revelación de Dios muestra la condición del hombre”

    Una vez emplearon a un estudiante chino para que tradujera el Nuevo Testamento a su propia lengua.  Al principio trabajó traduciéndolo duramente, pero después de unas semanas, llegó rápidamente diciendo: “¡Qué Libro tan maravilloso es éste!  Me dice tan exactamente todo acerca de mí.  Sabe todo lo privado de mi persona.  Seguramente el que escribió este libro ha de ser el mismo que me hizo a mí” (The Gospel Herald).

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